Sucede que a veces las cosas pasan por casualidad, y los grandes amores suceden siempre por casualidad, un encuentro casual, una fotografía furtiva, o quizás solo coincidir en el mismo lugar o en dos lugares el mismo día...
Sucede que a veces no entendemos cuan importante es alguien hasta que ya no esta ahí, sucede que a veces buscamos en lugares equivocados nuestro futuro, o buscamos amor donde no lo hay.
sucede que a veces la vida tiene que llevarte lejos para luego traerte en este mundo extrañamente cíclico y mostrarte que aquello que alguna vez perdiste en realidad nunca se fue, solo paso que el amor tenia que crecer un poquito más con la distancia.
sucede que a veces tardas en entender que un clavo nunca sacara otro.
sucede que a veces piensas que ya no te queda nada por dar, y cuando empiezas aun hay mucho, muchísimo, y no por lo que eres sino por lo que la otra persona te hace ser.
Sucede que hoy quiero hablar de alguien, que siempre ha estado ahí, siempre, y ahora más cerca aun, puedo jurar que hasta siento su corazón latir junto al mio...
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